martes, 11 de diciembre de 2007

Mi hija Karina

Hipocampos

(Karina Bordon Villafaña)

Déjame que te enseñe mi amor,
Que arranque la cicuta de tu corazón
Juntos nadaremos el Leteo
Y beberemos de sus aguas, querido mío,
Así cada herida será olvidada,
Las tuyas, las mías, tu pacto de eternidad
Y mi amor incondicional
Sus pecas se irán borrando de tu mente
Y su danza de mi corazón
Y cuando lleguemos a la orilla
Sin memoria alguna, me reconocerás
Sabrás interpretar la profundidad de mis ojos
Y tendremos una mirada en común
Acariciarás mi espalda,
Cual hipocampo presiente el amor
Y viviremos como mariposas, un día a la vez
Envolviendo nuestros cuerpos
Y tú enredándote
En las ondulaciones de mi ser.

Hija

En una noche fría y estrellada de otoño,
como una hoja acariciada por el viento
se desprendió de su universo.
Pequeña exploradora del pecho materno,
piel morena, herencia de raíces atacameñas,
su llanto de libertad fue eco
entre los rayos de plata de una luna llena.
Así llegó a mi vida, frágil, pequeña, tierna.
Aferrándose a mi pecho
me regaló su mirada, su sonrisa
y sus primeras palabras.
La vi caminar como una cuncunita
y entrelazarse entre mis brazos
como el perfume a la hiedra.
Hoy la observo, como ha crecido
Adoro su sonrisa y su mirada de adulto y de niña,
Tengo miedo a que emprenda el vuelo
Y deje el nido vacío…
deseo con tenerla a mi lado
hasta el fin del día,
hasta el fin de mi último día.

1 comentario:

AMANDA dijo...

UYY KE LINDA ESA NIÑITA, KIEN SERÁ???

JAJAJ

TE AMO