(Julio Bordon
Mercado)
Rostro amoroso
de Dios vivo,
luz del amanecer
que te abres paso
entre las ramas
de los sauces dormidos.
Eres surco y arado
que penetras en la tierra
para despertar
la semilla dormida.
Agua pura y cantora
que acaricia las piedras
de riachuelos cristalinos,
luz del mundo,
uva, trigo,
nube, montañas, nieve,
praderas y caminos.
Naturaleza bella…
en el desierto
te vistes de amancayes
y en el valle de azulosos lirios.
menta, junco, salvia,
palo negro y olivillo,
grito de chilla
en noches estrelladas
de luceros encendidos.
Luz del amanecer
que te abres paso
entre las ramas
de los sauces dormidos
para escuchar a lo lejos…
… a lo lejos…
Sobre la fragancia
de los
cerezos en flor
El despertar de los trinos.
Amén.
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